Granada, Nicaragua
Sábado, 19 enero 2013
Augusto Cermeño
Los trabajadores despedidos y reintegrados tienen plena confianza de que la justicia brillara finalmente para ellos, al asumir el poder local la licenciada Julia Mena Rivera, como Alcaldesa de Granada y con el ingeniero Arturo Correa como vice Alcalde.
La licenciada Ana Morales, una de las trabajadoras despedidas y reintegradas, dijo que “la Julita Mena es una persona bien consciente de la realidad que hemos vivido como trabajadores despedidos…”.
Dijo que ella- la licenciada Mena- lo sintió en carne propia “porque su hermana fue despedida…”. Esperar que la reintegren en el cargo que ostentaba al ser despedida, cuando era Jefe de Archivos Biblioteca Municipal.
Martín Salas Silva, comentó que se siente contento y feliz “porque ahora si se nos va restituir plenamente nuestro derecho”. En tanto, el licenciado Oscar Moreira, dijo que se siente satisfecho luego de que se juramentara a la licenciada Julia Mena como nueva Alcaldesa de Granada.
Moreira, dijo que se siente seguro de que la licenciada Mena cumplirá el mandato del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), en el sentido de restituir el derecho a quien le corresponda, “lo que ha sido bandera permanente en el discurso del Presidente Daniel Ortega Saavedra y la compañera Rosario Murillo”.
Los trabajadores esperan reintegro y pago de salarios caídos. Matilde Auxiliadora Mojíca, dijo tener “fe y esperanza de que, lo que tanto dice la compañera Rosario Murillo, que vela y aboga por las mujeres, se haga algo real con doña Julia Mena, que nos restituya nuestros derechos, que vayamos al reintegro, pago de salarios caídos y, a lo que tenemos derecho: un salario y un trabajo digno”.
Juan Carlos Mairena, es de la idea de que “cada uno de nosotros debemos darle un momento de apertura a este Gobierno, dado de que el Gobierno del FSLN, aboga por los derechos de los trabajadores”.
Espera que lo que no hizo el Gobierno de Eulogio Mejía Marenco, “este Gobierno lo haga, que es restituirnos el derecho, por medio de una sentencia judicial que a nosotros se nos había dado y que el Gobierno de Eulogio Mejía irrespetó”.