Granada, Nicaragua
Sábado 11 mayo 2013
Augusto Cermeño
Trabajadores del sector industrial empresarial, Zona Franca, maestros y trabajadores de la salud, debatieron sobre “trabajo decente” y las debilidades en aspectos de salud, salario, edad y derechos laborales del trabajador.
El debate, organizado a manera de foro, fue promovido por la Central de Trabajadores de Nicaragua (CTN). Extendiendo invitación empresarios, sindicatosy periodistas.
Emilio López, Secretario General de la CTN, dio palabras introductorias destacando que “el trabajo decente es una necesidad en Nicaragua”. Recordó que el año pasado se realizó un trabajo similar.
Por su parte, Francisco Marín, del Ejecutivo de la CTN, explicó que el debate trata de ver sobre como es el “el trabajo decente” en los diferentes centros laborales, si se esta cumpliendo. Se refirió a la comparación de las regulaciones laborales nacionales con los convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
No hay regulaciones para el trabajo nocturno en casos como los CPF
Una de las debilidades del sistema laboral nicaragüense que se ventilaron en el debate es la falta de regulaciones al trabajo nocturno, estando trabajadores de vigilancia, como los CPF, entre otros, en condiciones infrahumanas.
Sn pocos los derechos que asisten al trabajador nocturno, los que en la mayoría de los casas permanecen horas de pie y terminan debilitado sus salud, por lo que muchos de ellos terminan con padecimientos de la columna.
También se hizo referencia a los reducidos espacios laborales para personas mayores de 40 años. La trabajadora de la salud, Maritza Rivas, consideró que en el Hospital se cumplen algunos elementos propios de un trabajo decente.
La trabajadora de la salud, Sandra López, consideró que en el caso de las zonas francas los inspectores del trabajo no pasan de las oficinas con aire acondicionado y que se deja en la indefensión al trabajador.
José Sequeira, de MONISA, valora que en esta empresa granadina “se cumple eso del trabajo decente” y el Ministerio del Trabajo ha bajado con sus inspecciones hasta las plantas industriales, encontrando que en la planta de concentrado “es donde habían más problemas”.
La empresa médica estuvo en el banquillo de los acusados por el mal servicio que dan, además de la falta de medicamentos. Hay una total desconfianza en las previsionales y más bien las miradas de los trabajadores se enfocan al Hospital Japón Nicaragua, donde hay más recursos, mejores médicos y mejor servicio.
Maritza Rivas considera que cuando se introducen las quejas, a lo más que llegan “a quitar al director, que no funciona, ponen al otro es igual. Solo hacen como que quieren resolver el problema, pero no lo resuelven”.
Para Maritza, es mejor mantenerse en el Hospital Amistad Japón Nicaragua “porque por lo menos tiene cara de hospital. Tenemos Cuidados Intensivos de niños y Cuidados Intensivos de adultos. Ahí – Clínica previsional- no creo que vayan a poner. Tenemos especialistas en el hospital, en Cruz Azul, todos son médicos generales”.
Los trabajadores lamentaron que los empresarios, los patrones, tengan el artículo 45 del Código del Trabajo, para despedir “por cualquier mala mirada” a un trabajador.
Hablaron de “trabajos forzados”, en los casos de trabajadores que son obligados por la necesidad a realizar horas extras como cargadores de harina y afrecho, en la MONISA. Las horas extras, eso sí, son pagadas debidamente.
Maestros lamentan falta de libertad sindical y tienen la aspiración de reactivar el sindicato de FENITEC
El profesor Mario Gutiérrez, se quejó de problemas de libertad sindical en el magisterio, ya que predomina, según el, “los sindicatos ANDEN –Asociación Nacional de Educadores de Nicaragua- y el Movimiento de maestros sandinistas, que no resultan confiables para el maestro”.
Dijo que “los maestros estamos indefensos. No hay neutralidad en los sindicatos existentes” y criticó el diplomado al que, según Gutiérrez, no asisten la mayoría de los docentes. Hay mucha expectativa en el magisterio por un incremento salarial.
Luis García, del sindicato de la Tip-Top, reconoció que en su empresa hay un buen nivel de trabajo decente. Tienen logros como el comedor, que en algunas empresas ha desaparecido, si el Seguro Social falla en la atención médica, la empresa los manda a una clínica privada y tienen un bonito convenio colectivo. Eso sí, “el que viola las normas de seguridad, se va”.
Nazario Jaime, de la E. Chamorro, reconoció que en su empresa “había comedor, pero se les da un estipendio de 60 córdobas por almuerzo, 25 por desayuno y a los trabajadores de la noche les dan 35, además de los 60, para un total de 95 córdobas.
Maritza Rivas, del sector Salud, lamentó que en ese sector laboral “no se negocia convenio colectivo, firmamos el que ya esta hecho, como le conviene al Gobierno”. Planteo el problema del “incremento salarial del 4%, mientras todo sube de precio. El huevo subió de 95 a 135 córdobas de un solo”, comentó Rivas.
En Nicaragua los espacios se están cerrando
Eugenio Membreño, del ejecutivo de la CTN, refiriéndose a la lucha por un “trabajo decente”, dijo que eso esta ligado directamente al trabajo con derechos. Consideró que en Nicaragua, los espacios para la libertad de organización sindical se están cerrando.
“No existe libre sindicalismo en el Estado”, lamentó Membreño. Refiriéndose a las zonas francas, señaló que “el Gobierno tiene trato preferencial con la Zona Franca”.
Habló de un compromiso de la CTN con los trabajadores de la maquila, para fortalecer la organización sindical. Valoró como muy importante “contar con la unidad de los trabajadores”.
Concluye que el “trabajo decente” es el “trabajo con derechos a la libre sindicalización, a la Convención Colectiva, mejores condiciones de trabajo, seguridad social, buen trato, respeto a los convenios fundamentales de la OIT y el rechazo a las horas extras, porque “es un salario insuficiente y agrava el problema, porque afecta la salud del trabajador”.