Arte y Cultura
Granada, Nicaragua
Por: Augusto Cermeño
El artista jinotepino Ilich Guillermo López Chávez, ha iniciado, desde el 28 de septiembre (2015) una larga jornada de pintar, con motivos religiosos, las tres naves de la Santa Iglesia Catedral y sus columnas.
El joven pintor nos habló de su meta, de pintar todo lo antes descrito, en un período no mayor de dos años y medio. Considero que su principal móvil es el reto, es el realizar una gran obra, al estilo de Miguel Ángel Buonarroti, quien fuera un arquitecto, escultor y pintor italiano renacentista, considerado uno de los más grandes artistas de la historia tanto por sus esculturas como por sus pinturas y obra arquitectónica. Miguel Ángel (Caprese, 6 de marzo de 1475-Roma, 18 de febrero de 1564), fue el autor de gran obras arte y arquitectura.
Este gran artista renacentista, en mayo de 1508, aceptó dirigir la decoración de la bóveda de la Capilla Sixtina, cuyos frescos concluyó cuatro años más tarde, después de un trabajo solitario y tenaz. En esta obra ideó una grandiosa estructura arquitectónica pintada, inspirada en la forma real de la bóveda. En el tema bíblico general de la bóveda, Miguel Ángel interpuso una interpretación neoplatónica del Génesis y dio forma a un tipo de interpretación de las imágenes que conseguirían ser un símbolo del arte del Renacimiento. Desarrolló su labor artística a lo largo de más de setenta años entre Florencia y Roma, que era donde vivían sus grandes mecenas, la familia Médici de Florencia y los diferentes papas romanos.
Es precisamente a este gran artista al que el jinotepino que está trabajando en la Catedral de Granada, a modo de seguir sus pasos, pintando la escena de la creación, incluyendo la imagen de Adán.
No le gusta imitar pero…
Pero, nos advierte, que no está tratando de imitar a Miguel Ángel, o copiarlo, que solo va a dedicar un par de ilustraciones propias de la obra de Miguel Ángel y que seguiría con motivos propios de él, que sería consultado con las autoridades religiosas de Granada.
Incluso, nos dijo que algunas imágenes, donde esta Dios, el Creador, corresponde a su hijo, niño que tiene enfermo, con padecimiento que amerita una gran operación, que la que pone en riesgo la vida del menor. Incluso nos confesó que ese niño lo repitió varias veces en la obra plasmada en la primera bóveda de la nave Central de Catedral.
Bendecido como artista plástico
Según Ilich, él ha sido bendecido con oportunidades muy importantes que lo hicieron dejar su carrera de Ingeniero Eléctrico para seguir el duro y difícil camino del arte, sobre todo en Nicaragua. Nos dice que comenzó a transitar por los caminos del arte en el dos mil, dos, cuando comenzó a estudiar en una escuela de arte.
“A partir de ahí, yo estudiaba ingeniería eléctrica, pero, a partir de ahí, descubrí que eso es lo que me gustaba a mí. Yo tengo título de ingeniero eléctrico, pero nunca trabaje en eso. Y como yo considere que esto fue lo que más me gusto, yo seguí con esto y no lo abandoné”, reiteró.
Sobre como apareció en Granada, donde hay tantos excelentes artistas plástico, nos dijo que él vino a Granada a trabajar con el italiano Franco Galluzzo, un ciudadano que actualmente reside en Estados Unidos y tiene una gran mansión en el Astillero.
Dijo que “él me trajo aquí, porque hizo amistad con el obispo y se acordó pintar el altar, con el Espíritu Santo”, donde está la imagen de la Conchita, patrona de Granada. “Una vez que terminó eso, salió la idea de pintarlo todo, hace como año y medio”, agregó el artista jinotepino.
Luego de terminar la obra en Catedral, “seguí trabajando con él – su mecenas italiano Galluzzo- en el astillero, hasta que consiguieron esta máquina para que yo ‘pudiera seguir. En el astillero pinte toda su casa, su casa es más alta que esto, pero no tan grande, un 70% del tamaño de todo esto. Pinté todos los techos, todas las paredes…”.
Las obras en Catedral son financiadas por Galluzzo, quien también mandó a traer, de Estados Unidos, una escalera descomunal, hidráulica, que le permite subir y bajar con gran facilidad al artista, manteniéndose realizando su labor con gran seguridad, pegado al techo de la elevada bóveda. El andamio vino de Estados Unidos hace unos 9 meses, lo que podría ser a principios del año (2015).
Cobra salario mensual
Hablamos con Ilich sobre el tema de pesos y centavos y nos dijo que en primer lugar estaba la idea de cobrar por obra, pero el precio por cada obra, “no era el adecuado por el precio que me iba a dilatar haciendo. Por lo que acordamos que me iba a pagar un salario mensual y el precio del costo de los materiales cada vez que yo los necesite, me los pasan”.
Nos dijo que todo el trabajo lo está costeando el italiano, y que “la iglesia no paga nada”. Le preguntamos cuánto es ese sueldo y la respuesta que nos dio fue un: “se lo voy a negar, eso…”. Dijo que “más que el salario, lo atractivo es el reto que esto representa para mí”.
Considera que “ninguna persona de Nicaragua, me daría la oportunidad de pintar semejante área y por un precio, que considero no está nada mal. Me sirve para comer con eso, construir mi casa y tengo para sobrevivir. Porque en Nicaragua, los salarios son muy bajos, pero gracias a Dios tengo un salario que considero muy bueno”.
Sin embargo, se considera una persona austera, algo a lo que lo acostumbró su progenitor, un profesor que trabajó mucho tiempo en el Ministerio de Educación, como Director General de Primaria. Dijo ser del barrio “El Socorro”, en Jinotepe.
No quería aceptar el trabajo: demasiado vasto para mí
Hablando sobre el trabajo, dijo que, primeramente, no quería aceptar el trabajo, al que “consideraba demasiado vasto para mí. No sentía valor para hacerlo. Pero, tengo un niño de diez meses, lo que me obligó a meterme a estos, meterme a semejante proyecto”.
Una vez que se metió, dijo que ha ido avanzando en estos días “y le voy agarrando el gusto, como dicen, porque a mí me encanta pintar. Yo cuando estoy ahí, yo no trabajo, hago lo que me gusta. Cada cosa que hago, para mi es diversión, pero el cuerpo no se siente divertido, resiente, se cansa y se rinde”.
Primero copia a Miguel Ángel y después sigue con sus propias obras
Hablando de la obra, dijo que al comenzar la obra, primero “copiar a Miguel Ángel, y después con obra mías, propias, pero con el estilo antiguo, no como yo lo hacía, originalmente, en mi casa, con cuadros modernos que no puedo reproducir aquí. Tiene que ser algo moderno, pero la idea principal es lo clásico”.
Hablando de las dimensiones de su trabajo, en relación a la obra de Miguel Ángel, dijo que está trabajado “a una escala menor que la de Miguel Ángel. Puede ser que yo esté trabajando a un 70% de la escala de Miguel Ángel, porque Miguel Ángel es un poco más grande”.
Mostrando lo que ha trabajado, nos señaló la Creación de Adán, “que está en la parte de la Capilla Sixtina, en San Pedro, de Roma. Comencé con el más famoso de los paneles que hizo él, con ese empezamos”.
Señalando hacia la nave sur de Catedral, hacia la bóveda, nos dijo que iba a continuar con “la creación de la luna y el sol. Porque íbamos hacer la separación de las aguas, pero mi jefe me dijo que hiciera este aquí y ya no la puedo hacer allá. Cronológicamente no estaría bien puesto”.
El artista dice que tiene la libertad, que le da su jefe italiano, “pero el problema es que en una iglesia esa libertad no es total. No voy a copiar nada, sino que voy hacer una semi creación, porque voy a tomar ideas de otras personas, de otros pintores y una parte mía. Lo ideal sería pintar a Adán y Eva desnudos, como está aquí. Pero, hacer mujeres desnudas, como que crea controversia…”.
Le expresamos nuestra opinión al artista sobre esa idea y que realmente el arte nada tiene que ver con interpretaciones o prejuicios de orden vulgar. El arte es arte, le dijimos a Ilich. Dijo que en la obra de Miguel Ángel, hay varios cuadros cambiados. Y en el mismo, pintó a su hijo en tres ocasiones.
Dijo, que si le es posible, tiene planeado pitarse él, su mamá, a su papá y toda la gente. “Y si algún vago viene aquí a decirme que lo pinte, lo pinto también”, aseguró. Esto es Nicaragua, esto no es Italia. Dijo que no tiene un plan para pintar todas las bóvedas y columnas, pero “ya voy agarrando el gusto”.
Dijo que el cuadro que actualmente está pintando, la creación de Migue Ángel, le falta una segunda mano y lo piensa dejar como un cuadro, con un marco de oro y una figura de Miguel Ángel, así, para hacerle un marco más personalizado”.
Dijo que piensa concluir la obra en “un poco más de dos años”, pero también consideró que tiene un hijo con un síndrome, que amerita una operación en la cabeza y el peligro es bastante alto. Si llegara a pasar algo, no se sigo en esto. No sé si tendría yo la fuerza como para venir a seguir. La idea que le planteamos a Ilich es que siga adelante, que su hijo está en las manos de los médicos y de Dios, que tenga fe para que el niño salga bien y siga adelante. La operación del niño es en noviembre y “cada día se va acercando más”, manifestó Ilich.