Granada, Nicaragua
Domingo 23 diciembre 2012
Llegó la Navidad. Para los cristianos, un momento de fiesta: nace Jesús nuestro Salvador.En Navidad Dios entró en el tiempo. Cada Navidad “recuerda” que es su “cumpleaños”.
La Navidad significa que Dios mira y viene al mundo con cariño inmenso. Viene a buscar a la oveja perdida.
Mira el corazón de cada hombre, de cada mujer, para ofrecer su Amor, para derramar bálsamos de ternura, para vendar heridas profundas, para animar buenos que no acaban de hacerse realidad.
Te mira a vos y a mí, con nuestra historia, con nuestras penas, con nuestras esperanzas, con nuestras angustias, con nuestra generosidad. Viene a decirnos que quiere calentar mi corazón egoísta, que pasó sed porque venía a darme agua viva, que conocerá el hambre porque se convertirá en Pan que se inmola por el mundo.
Viene a recordar que el pecador no es condenado, que vivamos en la alegría profunda del perdón divino. Nos viene a buscar, aunque tenga que pasar entre espinas, para tomarte sobre sus hombros, para llevarte nuevamente a casa, para sentarte en un banquete eterno.
Llega la Navidad. La invitación de Dios descansa sobre tu mesa de trabajo o en lo más profundo de tu espíritu hambriento de esperanzas. Es una invitación sencilla y perfumada, amable y sugestiva, bondadosa y humilde.
!FELIZ NAVIDAD!
