Nacional
Managua, Nicaragua
Clemente Guido Martínez. Historiador
El 26 de Febrero del 2016, a 38 años de su entrega por Nicaragua, los trabajadores de la Alcaldía de Managua nos reunimos para recordarlo. El año pasado nos alegramos con la realización del monumento al Comandante Camilo Ortega, que lo conforman una Marimba Monimboseño, el rostro claroscuro del Apóstol de la Unidad Revolucionaria, sobre el Mapa de Nicaragua Libre y un pájaro cantando a la libertad.
En esta ocasión lo hacemos con la realización de un mural dedicado al Comandante y a los combatientes populares de Monimbó, que con sus rostros enmascarados convirtieron los signos de la danza y el teatro popular en verdaderas armas de lucha contra la dictadura somocista. Vemos en el mural a Camilo rodeado de los combatientes populares, ondeando libremente las banderas de Nicaragua y del FSLN, irradiando los colores de la libertad y la paz en Nicaragua.
Dos obras artísticas de dos artistas diferentes. El monumento fue diseñado y realizado por el Arquitecto Federico Matus. El mural fue diseñado y realizado por el artista Rolando Bojorge. Dos generaciones de artistas muy diferentes, pero unidos por el arte. Recordemos que Camilo fue un intelectual, un hombre que se dedicó como parte de la lucha revolucionaria a incentivar la organización artística de los grandes maestros de las artes plásticas e intelectuales, contra el régimen de los Somoza.
El nombre de Camilo está ligado al grupo Praxis, uno de los más importantes grupos de artistas plásticos que han existido en nuestra Nicaragua bella. Por eso, no es coincidencia sino decisión política, conmemorarlo con arte y más arte. Por eso, hoy además del mural, nuestra Banda Municipal de Managua, Orden de la Independencia Cultural Rubén Darío, y el grupo de danza Flor de Sacuanjoche, del maestro Javier Durietz, acompañan esta conmemoración del apóstol de la unidad.
Lo recordamos con Arte, con Danza, Con Música. Lo recordamos con alegría, porque aunque no pudo ver el Sol de la Libertad, sabemos que su voluntad se cumplió en todos los años posteriores de obras a favor de y desde el pueblo de Nicaragua que ha realizado el Gobierno Revolucionario en sus diferentes etapas.
No quiero desaprovechar la oportunidad para recordar que hay otra aparente coincidencia, pero no creo que lo sea, sino una perfecta armonía histórica que el Amor Universal nos ha regalado.
El 26 de Febrero, también cumple aniversario de haber sido asesinado por los primeros criminales de la historia de Nicaragua, el Obispo Fray Antonio de Valdivieso, fervoroso defensor de los indígenas contra la inmisericorde explotación de los Conquistadores en el Siglo XVI.
Fray Antonio fue el tercer Obispo de Nicaragua, lo mataron a puñaladas en la casa cural de León Viejo, un 26 de Febrero de 1550, un grupo de conquistadores resentidos contra su persona por defender a los indígenas de Nicaragua.
¿Y cuál es el punto de encuentro entre el Obispo Fray Antonio de Valdivieso y Camilo Ortega Saavedra? MONIMBÓ.
La Comunidad Indígena de Monimbó, representante contemporánea de las comunidades indígenas que en el Siglo XVI fueron diezmadas, arrinconadas, explotadas, destruidas, todo en el nombre de la Evangelización, pero que hombres de Fe como Fray Antonio de Valdivieso, alzaron sus palabras a los cuatro vientos para denunciar que era mentira, que se estaba usando el nombre de Jesús para cometer los peores crímenes contra los indígenas que se podían imaginar los Reyes en España. Valdivieso murió defendiendo a los pobres, a los indígenas de Nicaragua; Monimbó fue una de esas comunidades que defendía Valdivieso en el Siglo XVI.
Monimbó fue la comunidad indígena que defendió Camilo Ortega en el Siglo XX, de los mismos crímenes cometidos por diferentes criminales en el tiempo, pero los mismos en sus corazones oscuros y sombríos.
Ahí está el vínculo histórico entre dos héroes defensores de los indígenas de Nicaragua. Fray Antonio de Valdivieso y Camilo Ortega Saavedra, dos espíritus indomables, dos almas nutridas del más sensible espíritu de solidaridad y amor por los pobres y explotados. Por eso, concluyo esta presentación del homenaje al Comandante Camilo Ortega Saavedra, recordando también al mártir Fray Antonio de Valdivieso.
Reseña histórica de Camilo Ortega Saavedra (compilada de diferentes fuentes documentales)
Camilo Ortega nació el 13 de diciembre de 1950 en Managua.
Era el hijo menor de una familia de seis hermanos. Su padre era Daniel Ortega y su madre Lidia Saavedra. El ambiente familiar influyó en la formación ideológica de los hermanos Ortega Saavedra.
Camilo Ortega estudió primaria en Instituto Pedagógico de Managua. Hizo estudios de bachillerato en el Salesiano de Masaya.
Comienza los estudios de ingeniería en la Universidad Nacional Autónoma de Nicaragua en León en 1969. En ese tiempo depende en la estructura del FSLN del comandante José Benito Escobar. Participa activamente en la lucha estudiantil y colabora con las madres de presos políticos. Apoya junto con Leonel Vanegas, Efrén Medina, Orlando Sobalvarro, Leoncio Sáenz y Róger Pérez de la Rocha el resurgimiento del Grupo Praxis. En León publica, bajo la supervisión de Leonel Rugama, un nuevo periódico llamado El Universitario.
Las inquietudes intelectuales de Camilo Ortega le hacen que se relacione con otros intelectuales y artistas con los cuales va conformando un grupo que se va implicando con el FSLN. La implicación de los artistas e intelectuales en la lucha contra la dictadura fue una de las líneas de actuación que Camilo defendió en el FSLN.
Así logra en 1970 reconstruir el GRUPO PRAXIS, logrando publicar dos revistas y realizar exposiciones y ventas de pinturas para reunir fondos para el Comité de Reos Políticos. Esos mismos años arrestan a Camilo junto a un grupo de intelectuales en la casa del pintor Leonel Vanegas.
Durante los años 1971 y 1972 Camilo Ortega realiza diferentes acciones de tomas de edificios singulares (iglesias y colegios) en favor de los presos políticos. En abril de 1972 se desplaza a Cuba para recibir entrenamiento político y militar y allí se relaciona con Carlos Fonseca.
En octubre de 1975 regresa de nuevo a Nicaragua, pasa por Chinandega y se establece en Masaya donde empieza a poner en práctica los conocimientos adquiridos en Cuba y se hace cargo de la organización del Regional de Oriente que comprendía los departamentos de Rivas, Granada y Masaya.
En 1977 el FSLN pone en marcha una ofensiva político-militar para evitar que la crisis en la que se encuentra el régimen de Somoza pueda ser recanalizada por sus aliados norteamericanos. Se le quita peso a la presencia en la montaña y se revaloriza la urbana. Camilo Ortega se encarga de la organización y planificar las acciones bélicas de octubre en Masaya.
El 10 de Enero de 1978, la dictadura Somocista asesina al periodista opositor Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, en Managua. Esto crea una efervescencia revolucionaria en todo el país, y Monimbó no es la excepción, por lo que el pueblo Monimboseño se alza en armas contra la dictadura militar.
Camilo Ortega Saavedra estaba presente en Managua durante la insurrección de Monimbó en Masaya pero se traslada a Masaya (aun cuando le habían recomendado dejar el lugar por el peligro existente) para asistir a una reunión.
El 26 de febrero de 1978 llega a una casa del sector de Las Sabogales donde iba a celebrar una reunión con otros compañeros (Hilario Sánchez, Arnoldo Kuant y Moisés Rivera).
En el barrio se realiza una protesta y la Guardia nacional penetra en el mismo con numerosos medios. Los manifestantes huyen y se esconden en las casas vecinas y la policía va tras ellos. Cuando llegan a la casa donde se estaba celebrando la reunión e intentan penetrar se produce un enfrentamiento armado en el que mueren Moisés Rivera, Arnoldo Kuant y Camilo Ortega. La represión armada se extiende a un grupo de ciudadanos que venían del mercado matando a varios de ellos, este hecho es conocido por el nombre de «La masacre de Las Sabogales».
Los cadáveres de los sandinistas fueron trasladados a Managua en helicóptero. Camilo Ortega fue enterrado en el Cementerio General de la Ciudad de Managua. Camilo Ortega Saavedra murió a los 27 años de edad recién cumplidos.
Pero su muerte no fue en vano.