Granada, Nicaragua
Por: Augusto Cermeño

La toma de calles y aceras se ha puesto de moda en Granada, sin que las autoridades, principales causantes del desorden y la anarquía reinante, hagan algo por corregir el problema. Varios puntos de la ciudad han sido tomados por precaristas y hasta por concejales de administraciones pasadas.
Se han tomado áreas verdes, calles y aceras, perjudicando la vía pública. Este desorden, criticarlo, es malo para los que en la actualidad tienen tomado un predio, que es acera y calle, de la parada de buses a Managua (ordinarios) dos cuadras al oeste y una al norte.
Muy temprano nos personamos el miércoles 7 en el lugar y realizamos consulta con dos señoras vecinas del sector y promotoras de la toma.
La señora Yamila Martínez Mendoza, dijo que si tomaron la decisión de meterse al predio “es porque aquí hay violaciones, robadera y sirve de basurero. La Alcaldía no se presenta para botar la basura”.
Martínez Mendoza dijo que “entre las dos pagamos y nos limpian”. En tanto, la señora Erica Centeno, manifestó que la toma “es para beneficio de la comunidad, porque esto es unas tinieblas a las 6, 7 de la noche”.
El área pública tomada, es la acera que da a los muros perimetrales de una propiedad, cuyos dueños, según Centeno, viven fuera del país. Les explicamos a las señoras Centeno, Martínez y otras personas presentes, que ese lugar es calle y área peatonal que no es para vivienda.

Aun con todo eso, les explicamos que cualquier día pueden mandar adoquinar el lugar y tendrán que salir de la calle y acera, porque estamos seguros que la Alcaldía no esta repartiendo calles y aceras para construir viviendas.
Centeno dijo que no tienen apoyo de la Alcaldía, pero que están reuniendo gente “para pedir apoyo, porque para nosotros esto esta abandonado”. Agregó que algunas personas dijeron que ellos se les habían adelantado con la toma del área pública.
Agresivos y amenazantes
Nos presentamos al lugar, nuevamente, para ver si los supuestos precaristas estaban aún en el lugar, y nos encontramos que llevan en serio la toma y que ninguna autoridad municipal o policial se había presentado.
Nos salieron al paso un grupo de personas, entre ellos, una de las señoras que hablaron de la toma y se mostraron molestas porque decimos que ese lugar no es para vivienda, es calle y acera, para la circulación vehicular y peatonal.
Un joven salio hablando con mucha agresividad, igual que la señora Centeno, exigiendo que los medios no opinemos sobre estos abusos que se han venido cometiendo a la vista y paciencia de las autoridades, en diferentes untos de la ciudad de Granada.
Hasta mencionaron al Presidente Ortega. Uno de los toma tierras dijo que si no habíamos escuchado al Presidente Ortega y le dijimos que no. Alguien nos informó que los que se están tomando la calle son apoyados por el CPC de Los Tanques.
Tenemos entendido que el Presidente Daniel Ortega no aprueba estos abusos, y que los toma tierras intentaron el miércoles 7 de septiembre 2011 obtener el apoyo de la jefa del poder Ciudadano en Granada, Martha Beatriz Alemán quien les aclaró que no se apoyan esos abusos. El Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) no apoya tomas de tierras de nadie, ni, mucho menos calles o aceras. Martha Beatriz confirmó a LA VERDAD tal postura del Gobierno y el partido de Gobierno.
Sobre las amenazas, nos reservamos el derecho a demandar a las personas que han incurrido en ese delito. Lo que más nos preocupa, es que una persona de la tercera edad llagara a decirnos que en Managua sería objeto de linchamiento, lo que es decir asesinato a mansalva, lo que es una amenaza muy grave en contra del periodista y en contra de la libertad de expresión. Esto revela una actitud dolosa y criminal.
Los toma calles en Los Tanques observan una conducta en la que no basta la simple amenaza, sino que se muestran capaces de matar a quien se oponga a sus actos ilícitos. Como medio, jamás vamos aprobar que nuestras calles sean invadidas, ni ninguna propiedad privada, porque ese eso es totalmente ilícito e ilegal. Es un acto propio del desorden y la anarquía reinantes.