Alaska
Juan M. Roblero
Te dejo pueblo mío, no sin sentir un poco de tristeza;
Aunque apenas voy partiendo
Ya siento la nostalgia.
No sè en que forma actúan los extraños de ese lado
Con los extraños de esta parte.
Sè que existe xenofobia muy enraizada
En el ser humano.
He observado tanto la familia y de verdad
Que ni en ella tenemos el mismo pensamiento.
He oído que ahí del otro lado
Cargan rabia por el nica atolondrado
Que llega por un poco de sustento.
Yo no vengo mi hermano a quitarte tu comida,
Ya que Dios sembró el trabajo en mis venas.
No lo niego, tenemos paisas que de la vida, hacen una borrachera
Pero no son ellos la esencia de mi patria, sino enfermos
Que le temen a la vida.
Tu sangre y la mía se han fundido y ya tu piel
Es tan mestiza como mi piel.
Yo agradezco la acogida incierta de este suelo.
Pero sé que Dios la hizo para que la habite
Cualquiera de sus hijos.
Juan M. Roblero.