Departamental
Alejandro José Gallard Prio
Domingo, 21 de diciembre del 2014.
Nicaragua, es un interesante país de América, posee legislación ejemplar, la cual, a veces no se pone en práctica, por no convenir a los intereses aliados, que siguen subsistiendo a través de su convulsionada historia con políticos que se convierten en acaudalados empresarios.
Nicaragua también es cuna de poetas, novelistas, analistas, filósofos, escritores, además de que exporta talentos, pero como bien dice, Jorge Cuadra, escritor y patriota, lo que más hay, son "Alianzas de Intereses".
A través de su historia, gobiernos, políticos y empresarios han creado alianzas, ninguna de las cuales ha beneficiado al pueblo trabajador y, mucho menos a la niñez. Han pasado muchos años y Nicaragua no logra salir de la pobreza, debido a que esas alianzas, se han esmerado en beneficiar económicamente a los involucrados, ignorando, la educación, la salud y los derechos de sus conciudadanos.
Emulando el decir simpático de una amiga, no somos políticos, pues le decimos al Pan, pan y al Vino, vino y como la irresponsabilidad ciudadana, se ha generalizado en Iberoamérica, nos permitimos citar a Don Jorge, quien en uno de sus más recientes artículos, nos dice "Cuando se realizó la alianza entre el gobierno del Presidente Ortega (Nicaragua) y los empresarios, algunos la criticaron, pero otros vimos en ella una esperanza para agilizar la parte administrativa del estado mediante el reclamo de los espacios vitales para el buen desenvolvimiento del país y del gobierno. Ese era el momento de reclamar el control de la agricultura, del manejo de los impuestos, de la salud, de la educación, del mantenimiento de caminos y carreteras y del control de las aduanas".
Y continua "Para darle sentido al entendimiento entre el gobierno y los empresarios, el primero tenía que ceder y el segundo reclamar, pero el gobierno no cedió porque los empresarios no reclamaron".
Seguidamente, como resultado, menciona la ineficiente administración, que como siempre daña la economía y por supuesto, nada avanza, diciéndonos: "Si la empresa privada tuviese la suficiente fortaleza para exigirle al gobierno los espacios que le corresponden dentro del gobierno, hoy, "todo avanzaría" y todos reclamarían "el mérito y los aplausos".
Pero la historia de nuestro mundo iberoamericano, es diferente, trabaja con mentalidad especulativa, le hace falta inteligencia progresista, lo que ha dado como resultado, el abandono, que mezclado a los genes corruptos, han llevado a nuestros pueblos al cansancio, que los obliga a conformarse con migajas y prebendas o a refugiarse en el exilio.
Don Jorge, quizás pensando, de que no hay mal que no tenga remedio, nos dice en su escrito "que los gobiernos aprietan, pero no ahogan". Por supuesto que no ahogan, pero no por virtud, sino porque ese pueblo, aun a regañadientes, es el que paga los impuestos que alimentan al Fisco, que para la clase gobernante y sus "aliados" es la fuente milagrosa que engorda sus bolsas y los convierte en ricachos hacendados, regordetes residentes de mansiones y respetados miembros del "jet set".
A través de los años, he conocido muchos de ellos, algunos de los cuales he visto sudar en trabajos menéales en el exilio y todavía se quejan, sin admitir, que fueron ellos los que fallaron, que fuimos todos los que no supimos, como dice el Doctor Alfonso Oviedo Reyes, abogado residente de Miami, preparar y contratar Maestros, para educar a nuestra niñez en las virtudes ciudadanas, poniéndonos como ejemplo el proyecto educacional de Argentina en el Siglo XIX que fue modelo para Latinoamérica y que 20 años después, la llevo a ser una de las más fuertes economías del Mundo.
Pero ignoramos el ejemplo, pues no interesaba educar a nuestra niñez en los valores de la democracia republicana, dejando que populistas como Perón y sus seguidores, como Fidel y sus "compañeros" con la careta de protectores, lo que ahora parece estar de moda, retan a los políticos y empresa privada del mundo libre, a derrotar la pobreza y las enfermedades que diezman a nuestros niños enclenques, echándonos en cara, como le dijo uno de esos disciplinados, a mi hijo en La Habana, "si, tenemos escasez de todo, pero todos comemos, nos educamos y gozamos de salud. Qué vergüenza!
Hace muchos años, conocí en Miami a Domingo (Mingacho) Méndez Martínez, cuya familia controlaba en la Cuba de ayer, las fábricas de los cigarros "El Cuño", "Regalías" y "El As", entre otras marcas. Haciendo un recorrido por Centroamérica, me dijo ¿que llegó a ser Fidel a Cuba? Y sin respirar, continuo "fuimos nosotros, la empresa privada, la que al no darnos cuenta de que Batista era solo un accidente remediable, no previmos que al forjar una Alianza de Intereses con Fidel "estábamos cavando nuestra propia fosa, seguros de que no habiendo sido nosotros, ni Batistianos ni políticos corruptos, estábamos blindados".
Parece que la historia ni se lee, ni interesa, pues lo que les paso a los empresarios cubanos, ya se repitió en Venezuela y sigue su curso, ya que el Empresario, no quiere aprender la lección, de que deben reclamar el derecho a supervisar el buen funcionamiento del Gobierno, pues les guste o no, la educación, salud y derechos civiles forma parte de su propio bienestar, ya que bien saben que solo en libertad y respetando las leyes y regulaciones, los pueblo progresan.