Departamental
Granada, Nicaragua
Por: Augusto Cermeño
El tema de la apicultura, su dulce producción y sus problemas en Granada, fue abordado para LAVERDAD, en forma muy equilibrada, por el doctor Everth Marenco Torres, ex propietario de un apiario.
Marenco Torres nos explicó los pormenores por lo que dejó de producir miel de abeja, entre otros el problema de la africanización de las abejas, “un fenómeno que se originó en Brasil, porque se estaba haciendo un experimento de abejas africanas con abejas italianas, que era la que antiguamente se cultivaba, que era un poco más dócil, pero el híbrido que sale de ese cruce, sale un individuo muy fuerte, más productivo de miel, pero a la vez es más agresivo”.
Esa situación de fortaleza “le permite tener su apiario, su comida, de una forma más enérgica, poniendo en riesgo la convivencia con el ser humano. De ese híbrido que ha salido, domina el medio. En el vuelo nupcial, cuando la abeja sale a fecundarse, porque se fecunda una sola vez en la vida, y cuando está fértil, después de nacida, varios machos la salen a cubrir, ellos guardan todos los espermas en un saco y eso le dura por todo la vida, puede ser hasta de cinco años”.
La abeja “fecunda cada ovulo que va poniendo, a veces dos mil huevos al día, los va fecundando. Pero los individuos que la cruzan, son, precisamente los que están más africanizados, los fuertes. Entonces vuelve un individuo que puede ser, en algunos casos, muy agresivo, muy defensivo”.
Si a las abejas no las atacan, ellas no atacan
Explicó que “si a las abejas no las atacan, las abejas no atacan. Además, ellas tienen su territorio que protegen, que es de dos kilómetros de donde ellas están ubicadas. Entonces, lo que se mueve ahí puede ser atacado, porque, precisamente, está defendiendo su territorio”.
También considera que en el Pacífico, se vuelve más difícil el apiario, porque hay muchas casas, muy urbanizado y aún en el campo hay muchas casas. Entonces, cuando vos medís dos kilómetros en línea recta, aunque la casa esté, en camino, a tres kilómetros, el radio de acción de las abejas da menos de esa distancia y por eso se debe que mucha gente es picada porque están dentro del área de cobertura de las abejas”.
Recomendaciones ante la presencia de abejas africanizadas en el territorio
El doctor Everth Marenco Torres, ex propietario de un apiario en Granada, recomienda a los ciudadanos, sobre todo los que tengan cerca un enjambre o un apiario de abejas africanizadas, a que tomen nota de lo siguiente:
Las abejas detectan los colores oscuros: pantalones azules, la ropa negra, por lo que recomiendan que “se vistan de blanco, con sábanas blancas, que se cubran con blanco, lo que evita el piquete”. Las abejas atacan “todo lo que es oscuro y tienen como carretera los rayos del sol, por lo que se debe vestir de blanco para evitarlas”, sugirió.
Dijo que en las casas deben de mantener un área oscura, sin iluminación, porque es la luz su carretera, y pueden atacar a las personas cuando encienden una luz, por lo que recomiendan, cuando hay presencia de un enjambre, mantener la luz apagada.
“También es malo, empezar a pegarse en la cabeza uno a otro, porque está revoloteando y atrayendo, entre más pica más destripa y más abejas lo van a ir a buscar. Lo ideal es plegarse a la orilla del monte, a la orilla de las paredes, porque ellas vuelan en círculo alrededor de uno…”, indicó.
Cuando uno se orilla al monte, “se impide el vuelo de ellas. Hacerlo despacio, no sofocarse. Nosotros, cuando nos atacan comenzamos a darnos en la cabeza, con lo que armamos más alboroto, provocamos más a las abejas de lo que debiéramos”.
Insiste en mantener la calma, “porque uno, cuando esta temeroso segrega adrenalina, lo que le da una orden a las abejas para que lo sigan picando. Eso mismo sienten los caballos, los animales, desde el toro y las vacas. El caballo también siente la adrenalina del hombre, que le tiene miedo, incluso los perros y por eso atacan”.
Abejas africanizadas van hacia el norte, pero con ayuda canadiense hemos logrado exportar miel
El doctor Everth Marenco Torres dijo que las abejas van buscando el norte, sin tener la certeza de por qué lo hacen, pero se puede pensar que “van en busca de oportunidades de alimentación”. Sin embargo, las abejas, en buena parte, se han quedado en Nicaragua, gracias al apoyo de Canadá y exportamos miel.
Marenco Torres piensa que “siempre los cruces se van a estar dando, porque los individuos siempre, la ley de la naturaleza, el individuo más fuerte, más ágil, más capaz, es el que se va quedando con las hembras, es el que domina”.
Ayuda canadiense
“Es precisamente el híbrido, el que salió del cruce de las abejas africanas con las italianas, es el individuo más fuerte. Siempre vamos a seguir teniendo esa cuestión. El Gobierno del Canadá, que ayudaron mucho al Gobierno de Nicaragua en los años 80, para impulsar la apicultura. Ellos invirtieron cada año, casi dos millones de dólares para ayudar a la apicultura en Nicaragua”, refirió Marenco Torres.
El también comandante de los Bomberos Beneméritos de Granada dijo que los canadienses apoyaron a los apicultores, a nivel nacional. “Crearon en San Ramón, Matagalpa, seis asociaciones de apicultores. También seis asociaciones en Jinotepe, el Sauce, en Rivas, en Granada, en diferentes lados, y le dieron insumos, y crearon un Centro Apícola en Carazo”, recordó.
Proveyeron a los apicultores de materiales, “como láminas, espátulas para manejar las abejas, enseñaron a los apicultores todo el montaje del programa. Tenían tres técnicos que estaban enseñando a los apicultores nicaragüenses por más de 5 años, con un programa de CAREN Internacional, que es la ayuda humanitaria del Gobierno canadiense”.
El doctor Marenco califica de “muy importante para Nicaragua, porque muchos apiarios, de los que ahora están, que apoyan la producción de melones, se deben a ese programa con el Gobierno y el pueblo canadiense”.
Melón sin abejas no es tan productivo
Para Marenco Torres, “el melón sin abejas no produce la cantidad que debía ser, entonces necesitan tener apiario para que ellos produzcan miel. Muchos efectos de los que han dado, alguien sembró la semilla, ayudó a que eso germinara y ha dado resultado”.
Reflexiona en que “a veces uno no puede apreciar la inversión de ese esfuerzo, hasta dónde llegó, pero yo sí, sé que algunos apicultores han sido exitosos. En otros lados no ha florecido porque la población ha crecido y se han vuelto a los lugares que antes eran apícolas y ya no pueden poner abejas, pero si ha ayudado a que Nicaragua este exportando miel”.
Doctor Marenco se desligó de actividad apícola y está más dedicado a los bomberos
El doctor Everth Marenco Torres, dijo haberse retirado de la actividad apícola y que está más dedicado a la actividad de comandar el Cuerpo de Bomberos Beneméritos de Granada.
“Porque uno no puede montar muchos caballos, y alguno de ellos lo bota, la apicultura me botó a mí. Entonces he seguido en los bomberos”. Dijo que ni para el consumo casero produce miel, porque “hay que dedicarle tiempo y esfuerzo”.
Valora que “a veces uno se da cuenta que es limitado, y tiene que decidirse hacer –una de dos- pero sí los conocimientos y las experiencias lo he aplicado en los bomberos: enseñarles como matar las abejas, como capturarlas, para salvaguardar a la ciudadanía en caso de necesidad”.
Recordó que “hubo un bombero de otra asociación, no de la nuestra, que falleció por esa falta de conocimientos del manejo de las abejas. Nosotros hemos tratado, a nivel nacional, con la Federación de Cuerpos de Bomberos de Nicaragua, en mejorar las condiciones del manejo de las abejas, dentro de los bomberos, para ayudar a la población”.
Breve Caracterización de abejas africanas e italianas de las que habla el doctor Marenco
Abejas africanizadas
Las abejas africanizadas (comúnmente llamadas abejas africanas o abejas asesinas) son las abejas más peligrosas del planeta. Son híbridos procedentes del cruzamiento de la subespecie natural africana Apis mellifera scutellata con abejas domésticas pertenecientes a varias subespecies de A. mellifera, como Apis mellifera mellifera, Apis mellifera iberica y posiblemente otras.
La particularidad de estos híbridos es su acentuado comportamiento defensivo, describiéndose como muy agresivos ante molestias. Atacan en cantidad, muy velozmente y siguen a su víctima hasta a 900 metros de su colmena o enjambre. Este comportamiento ha provocado en América numerosas muertes de personas, incrementándose anualmente el número registrado de víctimas.
Historia
Con el propósito de incrementar la cosecha de miel en Brasil, se introdujeron en 1956 cerca de São Paulo, 47 abejas reinas de Apis mellifera scutellata originarias de Tanzania; a fin de desarrollar un programa de mejora genética a cargo de Warwick Kerr. Accidentalmente, algunas de estas abejas escaparon y se hibridaron con abejas domésticas. A partir de ese momento, se expandieron por todo el continente de manera constante. Avanzaron entre 150 y 300 kilómetros por año, llegando a América Central, México, y luego a los Estados Unidos, a los estados de Nuevo México, Nevada, Texas, Arizona y California.
Picaduras
El veneno está formado por una mezcla compleja: fosfolípido; hialorunidasa; melitina; fosfatasa ácida; alérgeno C; además de histidina, histamina y otros componente menores.
La gravedad del envenenamiento depende de la sensibilidad individual y del número de picaduras infligidas. Así, en un sujeto hipersensible puede ocurrir la muerte con una sola picadura como resultado de choque anafiláctico. Ha habido supervivientes de 500 picaduras. El veneno causa reacciones alérgicas y efectos tóxicos.
Tratamiento: Control del dolor con aspirina y otros analgésicos, compresas frías y extracción cuidadosa de los aguijones para no exprimir la bolsa venenífera, lo que podría aumentar el daño; para el caso se usa una tarjeta de cartón o plástico para retirar el aguijón sin tocar la bolsa. Dada la emergencia son útiles los antihistamínicos y corticosteroides por vía intravenosa. El uso de epinefrina es necesario en los casos severos de choque anafiláctico. De acuerdo a la evolución el paciente puede requerir de apoyo vital avanzado.
Productividad
Hay autores que han comparado estas abejas con razas europeas describiéndolas como más productivas en kilos de miel, otros concluyeron en sus trabajos que son menos productivas y otros no encontraron diferencias, no existiendo unanimidad en este criterio. Algunos creen que la africanización trae aparejada una disminución en la producción de miel por dos motivos.
Esta abeja híbrida en zonas tropicales acentúa su ritmo de reproducción (enjambrazón) tendiendo a una selección más que las razas europeas de Apis mellifera que prácticamente se comportan con selección K. Mientras una abeja europea como Apis mellifera ligustica o Apis mellifera carnica puede producir de 1 a 3 enjambres, los híbridos africanizados llegan a producir 9 o más enjambres por año.
Se cree que muchos apicultores abandonan la actividad a causa de la agresividad de estas abejas.
Abejas Italianas
La abeja italiana (Apis mellifera ligustica) es una subespecie de abeja doméstica nativa del sur de los Alpes italianos hasta el norte de Sicilia.
Origen
Es originaria de la parte continental del sur de los Alpes italianos hasta el norte de Sicilia. La subespecie puede haber sobrevivido la última edad de hielo en Italia tal como las subespecies genéticamente diferenciadas de la península Ibérica y de la Isla de Sicilia. Es la de mayor distribución geográfica de todas las subespecies de Apis mellifera, por el aprecio que le tienen los apicultores, y ha demostrado adaptarse a la mayoría de los climas desde el subtropical al templado, aunque es menos satisfactorio su trabajo en las regiones tropicales húmedas.
Las abejas italianas han evolucionado en el clima caluroso del mediterráneo; pueden soportar el duro invierno europeo y las frescas primaveras húmedas de las latitudes más al norte. Consumen buenas reservas en el invierno. La tendencia a criar tarde también en otoño aumenta el consumo de miel.
Genética
La variación genética de las poblaciones de Italia continental Apis mellifera ligustica, y de Apis mellifera sicula de la abeja de Sicilia fue investigada genéticamente mediante marcas en el ADN mitocondrial. Apis mellifera ligustica tiene en su linaje dos componentes europeos (M y C), mientras que Apis mellifera sicula tiene un miotipo genético africano «linaje tipo A». Se comprobó el origen híbrido de ambas subespecies.
Se consideraba que sólo la península Ibérica fuera un refugio de las abejas de «linaje tipo M» durante la última edad de hielo en el cuaternario. Hoy sabemos que la península Itálica desempeñó un papel similar. Junto con Apis mellifera macedonica, la abeja italiana es la representante del «linaje genético tipo C».
Anatomía
El abdomen tiende a ser castaño y las rayas amarillas. Entre las coloraciones de las abejas italianas hay tres colores diferentes: castaño claro, amarillo (dorado) y amarillo muy claro con miembros y placa torácica de color negro o castaño rojizo en el caso Cardovan. Son pequeñas de cuerpo y sus vellosidades son más cortas que en razas de la abeja melífera más oscuras como Apis mellifera mellifera. Longitud de la lengua: 6,3 a 6,6 mm; índice cubital: 2,2 a 2,5.
Resistencia a enfermedades
No hay ninguna evidencia que Apis mellifera liguatica sea más resistente a ácaros u otras enfermedades que el resto de las subespecies. A. m. ligustica también parece ser menos tolerante a Nosema que Apis mellifera mellifera. Estas son incapaces de retener las heces en el intestino por periodos largos y requieren de frecuentes vuelos de evacuación o de limpieza si las comparamos con las abejas oscuras. Son afectadas por el ácaro Varroa destructor , parásitos, y enfermedades bacterianas (loque europea, loque americana, ascosferosis, parásitos traqueales, nosemosis y otras).