Sábado 18 mayo 2013
Por Alberto Cuadra M
Miami, EEUU
Salió gritando y ya venía con su interioridad cargada de letras, era el año 1946,(en Granada) año en que brotó un fruto que crecería como un frondoso árbol. En su niñez, siempre buscaba los libros, aunque sea para tocarlos. Ese árbol fue bautizado con el nombre de Guillermo Menocal Gómez.
Ya en su adolescencia, las ideas y las figuras literarias le fueron atormentando y comenzó a escribir poemas relacionados con el diario vivir de los seres humanos.
Se traslado en su juventud a la ciudad capital de Nicaragua, Managua, donde se mezcló con el estudiantado universitario, matriculándose en “La facultad de Humanidades” (UNAM), de donde salió con el tiempo egresado en la rama de español ya que ese era su camino.
Durante vivió en Managua, se relacionó con algunas personas afines a su vocación de escritor (poetas) era a mediado de los años 60, por esa época escogió su nido(o lugar) intelectual “LA CAFETERIA LA INDIA”, que con el tiempo se fue haciendo famosa por ser visitada constantemente por escritores de la nueva y la vieja guardia, así como de pintores , los que entraban y salían, volvían entrar y salir y así pasaban las horas con estos creadores del arte, los que se leían sus escritos los unos con los otros, era una completa hermandad.
El poeta Guillermo Menocal, fue creciendo con el género de la poesía y muchas personas ajenas a la creación literaria fueron saboreando sus versos y se sentaban a su alrededor para escucharlo ya que tenía el don de la buena lectura e interpretaba sus poemas de manera magistral. Cerca de esa famosa cafetería otro poeta José Antonio Luna Centeno, alternaba los números con las letras en el Tribunal de Cuentas, ubicado en el Palacio Nacional, ejerciendo después con gran acierto el periodismo. Hoy vive en Tampa Florida.
Al lado de Menocal Gómez, se encontraban siempre reunidos, los poetas, Francisco y Mario Santos, Carlos Risby, Beltrán Morales, Carlos Pérez Macías,Ciro Molina, Felix Navarrete, el que escribe esta nota, Henry Rivas, Raúl Orozco(también con otros poetas que visitaban ese nido cultural antes mencionados) y atentos escuchaban sus lecturas de manera personal en ese lugar, cuando paría algunos poemas nuevos, los pintores, Leonel Vanegas, Genaro Lugo, Róger Pérez De La Rocha, Orlando Sobalvarro , Alejandro Canales (canalito) y los escultores Francisco Saravia, Frank Orozco, etc, etc, etc.
Cuando llegó de Costa Rica Carlos Martínez Rivas, se fijó mucho en la creación literaria de Guillermo Menocal y comentaba a manera de susurro que sería una de las promesas de la poesía nicaragüense, Martínez Rivas, con el tiempo fue tomando en serio la labor poetica de Menocal y nunca se equivocó de que sería uno de los jóvenes de gran valor con su creación literaria no solo con la poesía sino con el ensayo literario y los relatos.
El poeta granadino ha sido un errante por el mundo literario. Su alimento han sido las letras, el mundo que le rodea han sido las letras, su descanso y su ocio, han sido las letras y su trabajo en los últimos 12 años los dedicó a enseñar las letras dando clase de español en prestigiosos centros universitarios en el sector del estado de california.
Fue en 1974 que publicó su primera obra poetica “In Extremis” publicando después, “La Naturaleza del Ser”, ”Intrisico Ser” y más de 12 otros títulos que ha publicado en los Estados Unidos de Norteamerica, donde ha tenido valiosos reconocimientos de destacados literatos latinoamericanos y norteamericanos.
El poeta Menocal Gómez quien ahora vive en Milwaukee, en sus primeros años viviendo en Miami, participó en peñas culturales con grupos de escritores reconocidos, como el crítico de cine Jesus Callejas, El poeta y ensayista cubano y profesor universitario de literatura , Nicolás Emilio Alvarez, asi como el poeta cubano Angel Cuadra y otros escritores con los que participó en la peña cultural “SELENA” donde participaban también escritores nicaragüenses, como el poeta Marlon Espinoza Cuadra y el que escribe esta nota cultural. Recientemente el mencionado escritor, fue nombrado miembro de la Real Academia de la Lengua Nicaragüense.
A continuación, presentamos algunos poemas de Menocal Gómez.
MUCHACHA
Del libro In extremis
Muchacha
dancemos al compás del sol y del mar,
linda muchacha de miel y leche,
para disipar nuestras penas.
Aparta el miedo de tu ternura
ahora que de mi brota este torbellino
de risa y licor
Abre nuevos túneles en el aire y en la luz
-linda muchacha de miel y leche-
y cantemos al compás del sol
del cielo y del mar.
ARREBATO
Del libro Galería
¡Que volviéramos a vivir!
Pero vivir siendo el mismo
como si de un sueño despertáramos.
Despertar en el mismo país diferente:
Bulevares, edificios bordeando un parque
como en la postal colorida. Tarragona España.
Conocer viviéndome doscientos años, o más.
EL MENTIROSO
Del libro Galería
Embustero engañador farsante,
con qué argucias has dejado atónitos,
boquiabiertos, a tus oyentes,
afirmando lo falso,
contrariando la verdad.
Ingenioso charlatan creyendo tu mentira.
Impostor mitónamo, iluminado
por el mundo de la patraña.
¡Que osada tu impostura briosa,
inteligente y creativa!
De ti cuentan y no acaban:
Este es un hombre mentiroso que vivía…
¡Oh, personaje mundial y eterno!
Mentir es una costumbre
Que sabe tener la gente.
EN ALGUN LUGAR
Del libro La naturaleza del ser
En algún lugar alguien sueña con otra vida
Con otro tiempo, con un amor
que ha llevado siempre en su corazón,
con una esperanza que cambie su condición.
En algún lugar alguien sostiene
un constante vacío en su pecho y nadie,
nadie sabe de dónde proviene.
.
VOCES FEROCES Y ALTANERAS
Del libro La naturaleza del ser
¿Quién no ha despertado desmoralizado,
inseguro, con un fuerte sentimiento de culpa?
Yo he sentido las feroces y altaneras voces
de mi prójimo reclamándome fuera de orden.
He meditado sobre estos asuntos que han apartado
de mi vida la alegría de mi diario vivir.
Quiero conciliarme conmigo mismo, pero
{mi prójimo
me lo impide; busco la paz con él y no la encuentro,
porque hay una palabra que divide nuestro ánimo,
un camino que no podemos transitar juntos
y una pena que recorre nuestra sangre,
hasta que algún día esta se haga lava, roca,
cenizas, estiércol, polvo…
(¡Ojalá “polvo enamorado”!)
LOS RUIDOS
Del libro El pasado perdido
Contrario a la tranquilidad,
al reposo y a la concentración es el ruido.
Los ruidos atosigan nervios,
sobresaltan nuestros sustos
y los sue más placenteros.
El ruido nos persigue y acosa
fastidia nuestro espíritu sereno.
Abomino esos ruidos que se amontonan
en una calle para exhibir sus bocinas,
sus mofles, sus motores y sus pancartas.
Hay ruido con olor azufre, aceite y brea;
ruidos con olor a hospital,
a cloaca y excremento
que trepidan y ahogan
los tabiques de nuestras narices,
empañan nuestros ojos
y aturden los peludos y cerosos oídos
Un ruido mató a mi vecina, absurdamente.
Un ruido dejó mudo a un finado.
Un ruido delató una vez mi gran ilusión.
Mi gran amor..
Por culpa de un ruido un día
Quedó mi semen paralítico.
En fin, un ruido dejó sordo
a don Porfirio, el peluquero.