Granada, Nicaragua
Por: Augusto Cermeño

El siniestro se estaba propagando en el arroyo, donde predomina el pasto seco, y subieron las llamas hasta el techo de la casa del Comandante de Bomberos, doctor Evert Marenco Torres, quien no estaba en su casa en ese momento.
La familia Marenco fue avisada del peligro en que esta su casa por el licenciado Elvis Hernández y LA VERDAD y esta a su vez pasó la voz de alerta a los bomberos beneméritos.

La información de esa labor la dio el joven bombero voluntario Carlos Emilio Peña. Dijo que la casa del conato podría ser por la actividad de jóvenes cazadores de garrobos. Estos pudieron pegar fuego al pasto para agarrar el garrobo.
Carlos Emilio, dijo que si las llamas agarran fuerza dentro en el alero de la casa, se pudo pasar a una madera que está almacenada dentro del lugar y “se incendia toda la casa”. Como siempre, el polvorín se hubiera regado a otras viviendas