Comandante Valdivia destaca personalidad, ejemplo y firmeza de Claudia Chamorro

 

El Comandante guerrillero José Valdivia, destacó la personalidad, ejemplo y firmeza de Claudia Chamorro, al intervenir en el homenaje que la Asociación “Jorge y Salvador Bravo” le ofrecieron a los sandinistas bomberos, como lo fue Claudia.

 

Habló sobre el profundo pesar en las filas del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) cuando cayó Claudia, en una época cercana a la caída del comandante Carlos Fonseca Amador (9 de noviembre de 1976). Recuerda la versión que le dio el comandante Francisco Rivera “El Zorro”.

 

“La guardia los detecta, los persigue, los ataca y ellos vienen en condiciones deplorables, en tiempos en que no había comida, ni colaborador…”, dijo, en un intento por revelar las dificultades que vivían los guerrilleros en este tiempo, cuando la Guardia Nacional los perseguía y reprimía ferozmente a quien intentara apoyar la causa libertaria del FSLN.

 

Dijo haber salido de la montaña en 1975 y recuerda que al colaborador que la guardia agarraba lo mataba. “Entonces habían miles y miles de muertos, y eso nos motivó a nosotros a realizar la operación de asaltar a la casa del connotado somocista Chema Castillo Quant”.

 

Realizaron la operación guerrillera para denunciar las barbaridades, los crímenes que cometía la guardia somocista contra el pueblo en la montaña y dar un golpe de propaganda de que en Nicaragua actuaba un movimiento libertario que se llama FSLN.

 

 

En ese tiempo se mandaban las denuncias ante el Cardenal Miguel Obando, quien en ese tiempo “era enemigo de nosotros. Hay que decir la verdad. Aquí venían las ancianas, ponían las denuncias y les decía tráigame las pruebas. Qué pruebas iban a traer, cuando te matan a un hermano, a un primo, que lo entierran donde ellos quieren, solo que vayan a sacar el cadáver…”.

 

Cómo uno de los resultados del asalto a la casa de Chema Castillo Quant se da la denuncia de la muerte de centenares de campesinos en la montaña. Recuerda un tanto la versión que le dio el ex teniente de la Guardia Nacional (GN), José Antonio Robleto Siles, granadino, quien anduvo patrullando la montaña.

 

“Me dijo Robleto Siles que a ellos Somoza los reunió y les dijo: El FSLN ha hecho un trabajo político en silencio y ha logrado organizar a miles de campesinos en la montaña. El FSLN es nuestro peor enemigo, si nosotros no los matamos a ellos, ellos nos matan a nosotros”.

 

“La orden de Somoza es matar a todos los que estaban colaborando con el FSLN y los guardias eran asesinos también. El que mataba a uno, se metía a la guardia. Esa gente con facilidad le quitaba la vida a un cristiano”.

 

 

El comandante guerrillero José Valdivia, en su testimonio de lucha dado en el cuartel de los bomberos Beneméritos de Granada, hizo referencia a las dificultades que la guerrilla sandinista enfrentó en la montaña en los tiempos que el comandante Carlos Fonseca era el jefe máximo de la guerrilla sandinista.

 

Recordó que el comandante Carlos cayó en combate cuando planificaba una ruta de la montaña a Honduras, en un intento por conectar la guerrilla al mundo, con la idea de canalizar apoyo que fuera más allá de las redes de colaboradores campesinos en la montaña.

 

“Carlos Fonseca Amador se fue con la esperanza de hacer una ruta a Honduras. Yo les había planteado, desde antes, que hiciéramos una ruta a Honduras y no quisieron. No querían que abriéramos un ruta a Honduras porque dependíamos de una ciudad…”, recuerda Valdivia.

 

Agrega que esa situación “son pequeñeces del corazón, cosas feas. El hecho es que manda a un campesino para que haga la ruta a Honduras. El campesino se emborracha en el camino y lo agarran preso y no lo matan, porque dicen que es abigeo. La cosa es que se frustró la ruta a Honduras”.

“Pero el pobre Carlos Fonseca Amador, con dos, tres, cuatro hombres, y la Claudia al lado de él, en ese momento, y después Carlos que se mueve… y la manda con el mejor hombre que tenía, que era Francisco Rivera. Entonces, cuando ellos van bajando, es cuando la guardia les cae, los ataca, y, desgraciadamente, la hieren y dice: Zorrito, córrete, anda que a mí me pegaron…”, relató Valdivia.

 

Valora que “la muerte de ella fue un acto heroico. Como mujer, como combatiente sandinista, fue un acto de verdadero heroísmo, de verdadero sacrificio… En ese tiempo nosotros todavía teníamos cierta mística y decíamos que estábamos siempre dispuestos a dar la vida por el compañero, por el hermano que estaba al lado…”.

 

Un tanto apesarado, el comandante Valdivia dijo que “todos los valores se han perdido y el FSLN tiene que conservar siempre esos valores. La derrota de Somoza. Esta derrota de Somoza costó cara a Nicaragua, con mucha sangre de jóvenes, de mujeres, de ancianos, de niños, de todo”.

 

Valdivia consideró que “la solidaridad, la fraternidad, debemos de mantenerla. Debemos de estar siempre buscando cómo apoyar al compañero que nos apoya”.

 

Ve con preocupación que no hay un dominio integral del proceso histórico reciente, en el que el FSLN ha jugado un papel preponderante dirigiendo los destinos del pueblo nicaragüense.

 

“Porque uno sabe una cosa, otro sabe otra cosa, pero todo el conjunto de todas las cosas nadie las sabe. Nos queda seguir el ejemplo de Claudia, seguir el ejemplo de Pechesito Chamorro…”, manifestó el comandante guerrillero José Valdivia.

 

 

El comandante guerrillero José Valdivia, invitó a los granadinos a realizar un reconocimiento póstumo a los combatientes caídos después del 19 de julio de 1979, en defensa de la Revolución Popular Sandinista.

 

Hizo referencia de aquellos sandinistas que después de su participación en la insurrección, se fajaron en la lucha por la defensa de la Patria, se movilizaron “una y otra vez a las montañas, nunca descansaron hasta que cayeron en combate”, reconoció quien fuera uno de los jefes insurreccionales en el Frente Sur.

 

“Debemos hacer el reconocimiento póstumo a los que cayeron, ya sean de aquí, de la ciudad, como del campo y de todos lados. Tenemos esa historia. No sabemos qué se hicieron, solo conocemos a los grandotes”. Dijo que el único soldado que ha figurado en la Historia es Montoya. Pero, hace un esfuerzo de memoria más y menciona a Andrés Castro, de la Guerra de San Jacinto.

 

Insistió en sugerir que “se vaya levantando las biografías de los compañeros y estos señores les pueden dar buenos testimonios. Todos tenemos la obligación de hacer eso. Es el mensaje que les doy, porque que más voy hacer si ya nosotros estamos fuera de todo, ahora los que están al mando son otros muchachos, la nueva generación…”.

Saludó cariñosamente a doña Bertita Chamorro de Cuadra, tía de Claudia Chamorro y esposa del prestigiado médico y cirujano granadino, doctor Silvio Cuadra Sáenz.

 

Consideró muy importante la transmisión de ideas e ideales sandinistas a los jóvenes, para ver mejor “la tarea que tienen por delante, para que el FSLN siempre siga viviendo con la moral, con ese ejemplo formidable que nos dieron ellos”.