Granada, Nicaragua
Por: Augusto Cermeño

El tour organizado por la Asociación Sectorial de Líderes Comunitarios del Municipio de Granada, dejó perplejos a periodistas y dirigentes de comarcas y barrios de Granada, que vieron un monstruo que crece y crece sin control, tragando gran parte del camino de acceso al vertedero a cielo abierto.
El bus en que nos transportamos, por cortesía de los lideres comunitarios, no pudo continuar la marcha, quedando a medio camino, por lo que no menos de 800 metros los recorrimos a pie, por un sendero montoso, plagado de flores amarillas, que mitigaban los malos olores de tantos desperdicios.

En cuando al vertedero, que parece comenzar con una larga cordillera de basura de más de un kilómetro de largo, emana malos olores y crea nubes de moscas. Las moscas, incluso, se subieron “a la brava” en el bus de los comunitarios.
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Según Eleazar Robleto, responsable del basurero, el vertedero recibe más de 80 toneladas de basura diario. En él trabajan 25 familias acopiando envases plásticos, metal y cartón. Estas familias están debidamente registradas y cada seis meses se les exige un certificado de salud.
El funcionario dijo que en la normativa del vertedero no admiten la presencia de niños y animales. Aunque en el lugar se daban su buen festín una manada de cerdos.

Félix Vega considera que el problema de la basura es un problema de todos los granadinos
El concejal Félix Vega, considera que el problema de la basura es un problema de todos los granadinos. Dijo haber puesto a la orden del Alcalde a un personal técnico especializado que trabajó en el vertedero de Managua, los que contactó por medio de un amigo español.
A la propuesta de Félix, el alcalde le dijo que no había fondos. Sin embargo, Vega le sugirió al edil Eulogio Mejía, que se hicieran algunas modificaciones a las planillas para dar respuesta a la población.
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Además, Ramiro manifestó que se les meten corrientes de aguas pestilentes que escurre el basurero, lo que han planteado al señor Alcalde Eulogio Mejía, quien no les ha dado respuesta.
Los campesinos pidieron al Alcalde que les hicieran un desvío de esas aguas, pero no les han dado respuesta. Agrega que los cercos se caen cuando la basura satura los caminos y potreros colindantes.
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Todo lo que recogen se lo venden a un señor, no identificado, de Managua, que trabaja con uno de Masaya. El papel se lo venden a una señora de Masaya, que solo identifican como Argentina.
Don Rodolfo aseguró que hay una Ley en el basurero que impide el paso a los niños, aunque vimos unos cuantos bajo el árbol, junto con Espinoza. Aseguró que esos niños llegaban a cuidar la propiedad vecina al basurero.
Con Rodolfo andaba su esposa, doña Ana Rosa Guevara, de 44 años, quien dijo que su trabajo en el basurero “apenas da para el arroz”. Entran a las 7 de la mañana y se van a las 5 de la tarde.

La pareja reside en la comunidad de El Hormigón, donde han procreado 9 hijos. Los niños que estaban con ellos, aunque dijeron lo contrario, parecen ser tres de los 9 hijos. Una niña, de nombre Carla Patricia, dijo llevar los apellidos Espinoza y Guevara.