Departamental
Granada, Nicaragua
Sábado 06 Septiembre 2014
Augusto Cermeño
El mundo gay están reclamando un especio en la sociedad, que les permita ser reconocidos como personas normales y no se les discrimine, aunque hasta ahora no existe un antecedente notorio de que son discriminados.
Conversamos con Roberto Bolaños Avilés, miembro de este sector de homosexuales granadinos, que desde hace mucho tiempo vienen desarrollando actividades como la elección de Miss Gay Granada, que hasta ahora no se conoce que alguien se les oponga o proteste por esta actividad.
La verdad es que hasta en las bandas rítmicas de los colegios, destacan, por lo general, los estudiantes gay que hacen todo un show, un espectáculo, que en muchos casos goza hasta de aplausos del público, opacando a las preciosas niñas que hacen lo mismo.
Nadie los maltrata, nadie se ha opuesto, sin embargo, Roberto insiste en reclamar ese espacio, porque sean reconocidos sus derechos como gay, que les apruebe una ordenanza que les reconozca sus derechos.
La ordenanza ya fue trabajada e introducida al Concejo Municipal, durante la administración del ingeniero Eulogio Mejía, el 26 de octubre del 2012, en un período en que Eulogio estaba por entregar su mandato. Sin embargo la propuesta de ordenanza de los gay “fue pasada a la Comisión de Sociales”, según Bolaños.
Según Bolaños, una vez que inicia mandato la licenciada Julia Mena, introducen nuevamente la propuesta de Ordenanza. “Nosotros, la diversidad sexual en Granada, queremos una política pública que hable y nos identifique como diversidad sexual”.
Quieren se les restituya derechos…
Roberto Bolaños Avilés, dijo que ellos están demandando que el Gobierno les cumpla a ellos, como sector de la diversidad sexual, se les restituya sus derechos.
Considera que uno de los sectores “más marginados de Nicaragua es la diversidad sexual: por el tabú, por la discriminación, por la violencia, por la falta de empleo, por la falta de educación, a las cuales nosotras no tenemos ni siquiera derecho”.
Bolaños informó que todos los líderes de la diversidad sexual van a reunirse para definir “una estrategia política al 2015. Una estrategia política donde se luche por la aprobación de esta ordenanza”.
El dirigente gay dice que Nicaragua “es un país laico, no puede regirse por ninguna religión. Aquí los derechos humanos de todas las personas, de todos los nicaragüenses, sin distingo alguno, deben de prevalecer”.
Gay se sienten “violentados, marginados por muchos años y llevamos la violencia como algo normal en nuestra vida cotidiana”
Roberto Bolaños Avilés dijo que el sector que representa, los gay, se sienten “violentados, marginados por muchos años y llevamos la violencia como algo normal en nuestra vida cotidiana”.
Bolaños dijo que para los gay “el que alguien nos violente en la calle, en un centro de estudio, en un centro de trabajo, lo vemos tan normal que en Nicaragua no existe la cultura de denuncia”.
Dijo que son discriminados y agredidos y que “en la policía si averiguas las denuncias que existen de diversidad sexual, vas encontrar muy pocas”. Le expresamos a Bolaños que se observa todo lo contrario de su queja, porque en centros de estudio y en la calle los gay son respetados y hasta populares.
Muchos conocen a “La Perla”, quien ha pasado por muchos problemas de identidad, de pareja gay y se ha visto en situaciones difíciles y muchos granadinos estuvieron pendientes y preocupados por “Perla” y Perla logró superar sus propios conflictos sentimentales y la gente lo saluda con mucho cariño.
Jamás se ha escuchado de algún acto de agresión con Perla y todo el mundo es feliz comiendo su vigoron y tomando los refrescos, que vende en calle Atravesada, frente a la Ferretería Hermanos Briones.
¿En Granada se han dado casos de violencia?
Para Roberto Bolaños Avilés, “aquí en Granada se han dado casos de violencia, casos de violaciones. Yo he sido violentado muchas veces. Me acuerdo que una vez en el 2009, la Policía Nacional, estando en el Parque Central de Granada, estaba compartiendo con un amigo mío de Nueva Segovia, que me había venido a visitar, me dijo que tenía que irme del parque”.
Bolaños replicó diciendo que no tenía por qué irse del parque porque “era temprano y el parque estaba lleno de personas y si él quería que yo me retirara del parque, pues que a retirar a todas las personas que estaban en el parque y yo perfectamente me iba”.
Lamentó que la respuesta de los oficiales fue esposarlo y “me llevaron a pasear por toda Granada, me anduvieron exhibiendo y en Granada nunca hemos tenido Estado de Queda. No estaba haciendo nada malo, estaba frente a Catedral, a la luz de todo el mundo, conversando”.
Agrega que tuvo como “testigo de eso es el doctor Roberto Zamuria, a quien llamé para que llegara a mi rescate. Quería entablar, en aquel entonces una demanda contra los oficiales de policía y lo que no hice yo en el parque, lo fue hacer en la policía, darles mi nombre y mi apellido”.
Valora que “existe violencia, existe violaciones de derechos en Granada. Actualmente tal vez no porque se ha ido sensibilizando la población, a la policía, el Ministerio de Salud. Ha sido un trabajo muy arduo. Eso no dice o no quita de que siga habiendo violencia en Granada, contra la diversidad sexual”.
“No existe una cultura de denuncia”
Para Bolaños Avilés, la violencia contra los gay en Granada existe, “lo que no existe es una cultura de denuncia. Que una persona que la golpeen en la calle, de la diversidad sexual, va ir a poner la denuncia en la policía, no existe eso por el temor de que si denuncio, esta persona me va matar”.
Bolaños calcula que en Granada hay, de manera abierta y pública unas 600 personas gay. Pero “dentro del closet es grande la cantidad, que los que se asumen. Hay lesbianas en Granada, pero son muy pocas lesbianas. Se ocultan por la discriminación, la violencia, por el que dirán de la sociedad, por su familia y por tantas cosas”, reveló el dirigente gay.
Para Bolaños, los gay, las lesbianas, deben enfrentar a la sociedad, deben asumirse diciendo “yo soy gay, yo soy lesbiana, yo soy una transexual (los que se visten de mujer), yo soy bisexual, con honor, con orgullo, porque nosotros somos personas, seres humanos como cualquier persona en Nicaragua. Nosotros no somos ni extraterrestres, ni marcianos ni personas que venimos del infierno o algo por el estilo”.
Dijo que no ni extraños, ni raros, “somos personas como cualquier otro nicaragüense”.