Monitoreo Nacional
Managua, Nicaragua
Fátima Tórrez González
El supuesto asesino no corrió largo. A media cuadra del cauce donde fue rescatado el martes el cuerpo embolsado de Ángela Verónica Crespo, de 22 años, la Policía Nacional capturó ayer en la tarde al principal sospechoso del crimen. El hombre, identificado como Silvio Javier Mayorga González, de 23 años, fue visto por los meseros de un bar en el mercado Israel Lewites, en Managua, cuando salía con la mujer.
Extraoficialmente se supo que Marcos Antonio Robleto Martínez, de 62 años, el amigo que supuestamente sacó de su casa a Ángela Crespo, fue quien habría organizado el encuentro en un bar entre víctima y victimario.
Aparentemente Ángela Crespo y Mayorga mantenían un romance en secreto.
Mayorga, según versiones no oficiales, exigía a Ángela Crespo que dejara a su pareja, identificado como Gabriel Antonio Moreira, de 24 años.
Al parecer, cuando la mujer se opuso empezó una acalorada discusión que terminó en el asesinato.
Presos
Además de Mayorga, la mañana de ayer la Policía capturó a Robleto Martínez y a Moreira, quienes guardan prisión en la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocida como El Chipote.
Moreira está preso porque supuestamente no entregó el celular de Ángela Crespo.
Odisea
Mientras las autoridades del orden buscaban evidencias para esclarecer el crimen, los familiares de Ángela Crespo buscaban bajo cielo y tierra los 20,000 córdobas para comprar la caja hermética que solicitaba el Instituto de Medicina Legal, debido al estado de descomposición en el cual fue encontrada la víctima.
“Hasta en la tarde (de ayer) pudimos resolver lo de la caja, la Alcaldía (de Managua) nos la dio.
Ahora el problema es buscar los 3,500 córdobas que cuesta el terreno en el cementerio”, comentó Yessenia Díaz, hermana de Ángela Crespo.
La familia de la víctima es originaria de Bluefields y es de escasos recursos económicos.
Ellos tienen unos cinco años de vivir en el asentamiento Los Martínez.
Ayer mantenían la esperanza de velar el cuerpo, aunque fuese por unas pocas horas. Al cierre de esta edición, el cuerpo no había sido retirado del Instituto de Medicina Legal.