Subsidio ALBA en las facturas de energía es un disfraz, un muro de contención a la protesta popular y un gol electorero que pagaremos en el 2012

 

Hace muchos años, en los 60 y los 70, el pueblo protestaba y se iba a las calles por el aumento de cinco centavos al litro de leche. Ahora, nos aumentan la energía en un 40%, que no ha impactado en el incremento de la factura, por ese famoso subsidio del ALBA. El mismo Gobierno creó el problema para “bondadosamente” “solucionarlo” y ganar simpatías electorales reeleccionistas.

 

Ese subsidio del ALBA, no es otra cosa que un muro de contención contra un pueblo que seguramente se hubiera lanzado a las calles. Es un acto de propaganda política electoral, que más temprano que tarde el pueblo tendrá que pagar.

 

Estamos seguros que el subsidio, es como mensaje al pueblo pobre, y a la raquítica clase media nicaragüense, en el sentido de que se debe votar por el comandante Daniel Ortega para que ese subsidio del ALBA se mantenga o simplemente como “muestra de gratitud”, por ser “tan generoso”.

 

Es una jugada maestra de los estrategas políticos del orteguísmo, que buscan a toda costa asegurar un voto masivo, no solo el duro de los militantes del partido de Gobierno, sino que también un buen sector del pueblo afectado por el desempleo, los malos negocios, la crisis económica de los Estados Unidos, que contrae las remesas familiares, los bajos salarios de los trabajadores y el alto costo de la vida.

 

En todas estas cosas pensé cuando fui a Unión FENOSA o Dissur, a reclamar por la factura de Agosto, que me salió con un consumo de 178 KW/Hora, con un valor de un mil 100 córdobas, sumándose a esto 124.56 de alumbrado público, 59.87 de comercialización y 9.03 córdobas de “Regulación INE”.

 

Es evidente que Dissur o Gas Natural, es una empresa parásita que la mantiene el pueblo consumidor, de modo que cada empleado de esa empresa se paga con el pago de las facturas que caen pesadamente sobre las espaldas del pueblo consumidor. INE es una institución parasitaria, supuesto ente regulador que también cae sobre las espaldas del pueblo consumidor.

 

Pero, después de esta situación planteada, del incremento del 40% que nos salió a partir de Julio, el único que nos “salva” es el Gobierno del comandante Ortega, con el “subsidio ALBA” o “financiamiento ALBA”, que es un disfraz del zarpazo al bolsillo de los nicaragüenses. Alguien dijo con un gran derroche de humor negro: “Nos la metieron con vaselina”. El subsidio paga el incremento del 40% y la factura se me bajó a 911 con 92 centavos.

 

En el 2012 nos van a pasar la cuenta. El pueblo nicaragüense, como en los 60 y 70, debe despertar y dejar de estar haciéndonos los ciegos y lo sordos ante los actos que atentan contra la vida y la paz social de los nicaragüenses. Lo único, es que debemos de tener cuidado de quienes se quieran aprovechar del descontento popular para sacar agua para su molino y dejar al pueblo en la misma situación, como un circulo vicioso.