Monitoreo
Nacional
El Gobierno de Nicaragua se pronunció en contra de la separación de Dilma Rousseff del cargo de presidenta para responder a un juicio político que podría terminar en su destitución, y envió un mensaje de solidaridad para ella y su antecesor y padrino político, Luiz Inácio Lula da Silva.
En su acostumbrada alocución de mediodía, la coordinadora de Comunicación y Ciudadanía, Rosario Murillo, se refirió a la crisis política que se vive en el país suramericano y señaló que el proceso iniciado por el Senado brasileño en contra de Rousseff es “un golpe a la democracia”.
La carta con el mensaje está firmada por el presidente Daniel Ortega y Murillo, y refiere que han seguido la situación “con indignación y rechazo”.
“No nos asombran los argumentos y juegos políticos de las derechas que, como siempre, apuntan a debilitar o decapitar procesos populares de liberación de la pobreza y de transformación de la cultura opresora”, dice la misiva.
Dilma Rousseff es señalada por unas irregularidades fiscales en las que incurrió el Gobierno en sus balances de 2014 y 2015, así como de participar en una red de corrupción que operó en la estatal Petrobras, pues supuestamente supo de la misma y obstruyó una investigación al respecto.
En el mensaje también señalan que el pueblo de Brasil y el Partido de los Trabajadores, PT, con Rousseff y Lula a la cabeza, son y han sido “ejemplo de cambio y fuerza espiritual”, así como de “fortaleza” y “carácter”.
“Y hoy, frente al adefesio, se crece y llega cada vez más alto, en la inquebrantable convicción de los pueblos de que la lucha continúa y la victoria es cierta”, destacan.
Posteriormente califican de “un drama, una comedia, una tragedia, un mamarracho jurídico y político” el proceso que se abrió contra Rousseff y que la mantendrá separada del cargo de presidente por los próximos 180 días para responder a un juicio político.
Al final del mensaje, agregan una estrofa de la canción “El pueblo unido jamás será vencido” del grupo chileno Quilapayún.