Obituario
Granada, Nicaragua
Por: Augusto Cermeño
23 Febrero 2020
Justo Pastor Bermúdez, popularmente conocido como “Pochotón”, dio su último adiós el jueves 20 de febrero (2020) por la noche. Fue velado jueves y viernes. El sábado 22 de febrero con una nutrida participación de amigos, colegas y familiares que lo llegaron a despedir hasta la morada eterna.
“Pochotón” fue un gran dirigente, hombre de iniciativa, muy decidido a cambiar el desorden del transporte de taxis en Granada, que actualmente desde hace más de 4 años se mantiene sin una respuesta positiva a la demanda de taxistas.
“Pochotón” nunca se mostró en contra los taxistas ilegales, más de 600, en la actualidad, los que en una gran parte son gente sin empleo pero ha contribuido a crear una contradicción dentro del mismo gobierno, que mantiene el cobro implacable de los impuestos a los llamados “placas rojas”, o legales, mientras se mantiene en las calles los “placas blancas” o ilegales.
Esto lo supo manejar muy bien “Pochotón”, quien constantemente buscó como empujar el carro, de modo que la solución no dejara por fuera a los obreros del volante que conducen “placas blancas”, aunque dejó bien claro la actitud oportunista de sujetos, incluyendo prestamistas, que metieron hasta seis carros ilegales a trabajar.
Los obreros del volante que conducen carros con placas blancas, supieron entender las intenciones de Pochotón, de buscar un orden en el transporte selectivo de taxis, pero buscando garantizar la autorización de placas que beneficien a los taxistas “dilleros” de propietarios de taxis ilegales.
Gran deportista
Por muchos años, Justo Pastor Bermúdez “Pochotón” fue un pelotero destacado en las ligas de softball, jugando a la par y de tú a tú con peloteros como Rommel y Larry Zavala, jugando una posición importante en el campo, en la “lomita de los sustos”, y otras posiciones.
Él, en varias ocasiones nos dijo que en beisbol logró grandes éxitos para su equipo, conservando gratos recuerdos de sus compañeros peloteros. Con el tiempo dejo el deporte, dedicándose, sobre todas las cosas, a sus tareas de taxista. Logró calar muy hondo en el sector de los obreros del volante, siendo la calle de su casa constante abarrotada de taxistas que buscaban de él su consejo,
También lo consideramos un hombre de familia, dedicado a trabajar para llevar a casa el pan de cada día. Muy a menuda nos hablaba, con mucha satisfacción de haber procreado dos hijos, Alexis Bermúdez, también taxista e ingeniero agrónomo, y Auxiliadora, ejemplar estudiante universitaria.
Los profesionales como Alexis, condiciendo taxis, es algo que sucede en el sector selectivo de transporte, donde hay taxistas con diferentes profesiones, incluyendo ingenieros y hasta médicos.
La despedida a “Pochotón” fue bastante emotiva, mostrándose manifestaciones dramáticas de dolor que llegaban a las lágrimas, a llorar, con llantos impresionantes.
Estamos seguros que la mayor felicidad de “Pochotón”, no solo es ver el triunfo de sus hijas, sino que, además, la victoria de los taxistas en su lucha por un ordenamiento efectivo del sector.
