Granada, Nicaragua
Augusto Cermeño

Algunos menores, adolescentes, organizadores de la marcha que se en Granada, dejaron escuchar sus criterios y pensamientos tendientes a dejar de ser objetos “propiedad” de padres violentos.
También dejaron ver su oposición a la plaga de las drogas y reconocieron el apoyo que les esta dando la sección juvenil de la policía y la Comisión de la Niñez Granadina, que preside Karla Sequeira.

Jóvenes demandan que se brinde a los niños un ambiente que los aleje de la violencia y la mala influencia de las drogas
Los jóvenes adolescentes expresaron su preocupación durante el Carnaval Infantil, por el futuro de los más pequeños, de modo que se les brinda seguridad y se les distancie de la maligna influencia de las drogas y la violencia.
Demandan que los diferentes sectores de la sociedad y las instituciones “ayuden a fomentar ideas para que los niños no se metan en drogas, sino que busquen formas de diversión sanas”, manifestó el joven Luis Carlos González Montiel, coordinador de la Comisión Municipal Infantil.
El lema del Carnaval se podía leer en las mantas: “Quiero una vida llena de colores, sin golpes, sin gritos y sin abuso sexual”. La idea es que los niños, niñas y adolescentes dejen de ser bases de poder, “ellos son dueños de su propio derecho.

El niño Fernando López, dijo que se movilizó al Carnaval Infantil “por la celebración por el día del niño”. Shirley Concepción Jarquín, de 16 año, dijo que participa en la actividad “porque aquí nos expresamos como somos, por nuestros derechos”.
Tatiana Noemí Cruz Solano, de 15 años, dijo sentirse libre, alegre, emocionada, “porque queremos una vida llena de colores, sin golpes, sin maltratos, sin abuso sexual”. María Marcela Sánchez Gómez, de 15, dijo que se fue al Carnaval para expresarse, “porque no seamos objeto, somos libres, no andamos atados con cadenas”.