Monitoreo Internacional
La excongresista colombiana Aída Merlano, sentenciada a 15 años de cárcel por corrupción electoral, pidió garantías para entregarse a las autoridades, dos meses después de haberse fugado por una ventana, con una soga, durante una cita médica mientras cumplía la pena en prisión.
En una misiva difundida por su hija Victoria Merlano, la excongresista aseguró que tiene «toda la intención» de entregarse a las autoridades y esclarecer los hechos, pero pidió garantías, ya que, según su versión, fue condenada «por fuera de lo legal», al vulnerarse sus derechos constitucionales.
Según Aída Merlano, los policías que allanaron su sede política en Barranquilla (norte de Colombia) sacaron de sus chaquetas las pruebas ilegales por las cuales fue condenada.
«Jamás el magistrado que me juzgó indagó, como era su deber, de dónde provenía ese montaje o quiénes lo pagaron o dieron esa pruebas falsas», escribió la excongresista sobre la presunta evidencia encontrada por las autoridades, que incluía cajas con los supuestos registros de los votos comprados en las elecciones legislativas de 2018, así como los respectivos pagos realizados.
El 1 de octubre pasado, Aída Merlano obtuvo un permiso de las autoridades penitenciarias para asistir a una cita de ortodoncia en un centro médico de Bogotá. Sin embargo, cuando el doctor salió del consultorio, la excongresista saltó por una ventana con la ayuda de una soga y huyó en una moto que manejaba un motorista con indumentaria de la aplicación de servicio a domicilio Rappi.
