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“Estaba en el hospital cuando la doctora me pidió un medicamento y cuando regresé me indicaron que había sufrido un paro cardíaco y ya no pudieron restablecerlo”, dijo Luis Escalante, padre de Ángel Ariel Escalante Pérez, de 12 años, quien falleció tras haber sido lanzado de un puente por pandilleros.
Luis Escalante y su familia son originarios de Nicaragua. Indicó que su hijo soñaba con ser arquitecto debido a que tenía una habilidad con el dibujo. Además dijo que era un niño muy tranquilo, ya que nunca peleó con nadie.
El niño había sobrevivido a la caída el pasado 18 de junio, al quedar sobre unos árboles y fue trasladado al hospital general San Juan de Dios por cuerpos de socorro, en donde luchó por su vida durante varios días.
Julio Figueroa, director del hospital San Juan de Dios, confirmó que a las 16:45 del sábado perdió la vida el menor, luego que en los últimos tres días se había complicado su salud por el trauma en el cerebro.
La vida o la muerte
La madre del niño, Clarivel Escalante, angustiada narró que su hijo había desaparecido y que había reportado la desaparición a la Alerta Alba Keneth.
El pequeño fue secuestrado y lanzado por supuestos pandilleros del puente Belice, por no acatar la orden de asesinar a un chofer de bus, según lo que el pequeño les dijo a los bomberos municipales al momento del rescate, reveló el portavoz de este cuerpo de socorro, Javier Soto.
“Mientras lo subíamos contó que pandilleros le preguntaron cómo prefería morir, ¿si descuartizado o que lo lanzaran del puente? y este dijo que prefería que lo lanzaran”, agregó Soto.
La caída que tuvo el niño fue de unos 125 metros. Según Soto, las personas que son lanzadas o se tiran del puente no sobreviven.
Cuando los bomberos rescataron al menor, este estaba consciente, aunque tenía un trauma craneal y las dos piernas fracturadas.
Luis Escalante, padre de la víctima, dijo que el centro hospitalario donde su hijo fue llevado no ofrecía todos los cuidados necesarios al menor. Cuando su hijo murió, él había ido a comprar agua esterilizada que le habían solicitado.
Repatriación. Los restos de Ángel Ariel Escalante Pérez, de 12 años, fueron velados en Guatemala, pero fueron repatriados a Nicaragua este fin de semana, del domingo 5 de julio (2015).
