Internacional
AFP
Colombia, aún afectada por un alud que a principios de mes dejó más de 320 muertos en la sureña Mocoa, vivía este miércoles una nueva tragedia provocada por las fuertes lluvias: al menos 15 personas murieron por un deslave en la andina ciudad de Manizales.
«Se declara Calamidad Púbica en Manizales tras avalancha que afectó (cuatro) barrios, dejando al momento 15 fallecidos, 23 heridos y ocho desaparecidos reportados», indicó la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), en el último balance oficial.
La capital del departamento de Caldas (centro-oeste), a unos 2.200 metros sobre el nivel del mar y en plena zona cafetera de Colombia, se encontraba desde hace días en alerta por fuertes lluvias, pero la emergencia se desató en la madrugada de este miércoles luego de torrenciales precipitaciones desde la noche anterior.
«No sé a qué hora, sentí un ruido, como un estruendo, sí, un estruendo, pero deslizado. Me asomé, porque ya había bajado… se estaba bajando la avalancha en forma duro», contó un testigo en declaraciones recogidas para AFP.
El presidente Juan Manuel Santos, que suspendió su agenda para atender personalmente la tragedia pero recién logró aterrizar esta tarde en la zona debido al mal tiempo, destacó que las lluvias de las últimas horas en Manizales no tenían precedente.
«Esto es producto del cambio climático. Cuando hay aumento de la temperatura, las nubes se cargan más y llueve con más intensidad», declaró a periodistas el mandatario, haciendo un llamando «a cuidar» los bosques y el medio ambiente para evitar estas catástrofes.
«Derrumbes, deslizamientos, inundaciones»
Árboles caídos, vías tapadas y casas derruidas se veían entre los socorristas que buscaban sobrevivientes, según imágenes divulgadas por medios locales.
«La ciudad (está) literalmente incomunicada por derrumbes, deslizamientos, inundaciones», advirtió más temprano , en entrevistas radiales el alcalde de Manizales, José Octavio Cardona.
El director de la UNGRD, Carlos Iván Márquez, quien a pedido de Santos dejó Mocoa para coordinar las labores de búsqueda y rescate en Manizales, destacó que «de manera preventiva fueron evacuadas 400 viviendas» y anunció un plan de acción específico para asistir a los damnificados.
En Manizales, donde viven unas 400.000 personas, fueron suspendidas las clases, así como los servicios de agua, luz y gas en los barrios afectados, mientras las autoridades evalúan los daños y posibles nuevos riesgos.
Además, se mantiene el «monitoreo en la zona, especialmente en 12 puntos críticos donde se presentan deslizamientos», indicó la UNGRD.
La Cruz Roja Colombiana, en tanto, dispuso de 63 voluntarios para atender la situación, así como de cuatro ambulancias y otros equipos para realizar labores de búsqueda de desaparecidos, identificación de heridos, ayuda psico-social, entre otras.
Uno de los muertos fue identificado como el oficial de policía José Suárez, quien quedó atrapado por un deslizamiento de tierra tras «salvar a su familia y a un vecino», informó el director de la Policía Nacional, Jorge Nieto.
Reducir la vulnerabilidad
Según un estudio de la colombiana Universidad Nacional (UN) divulgado tras la tragedia en Mocoa, arrasada por una avalancha entre la noche del 31 de marzo y la madrugada del 1 de abril, que dejó 323 muertos y más de 100 desaparecidos, aludes similares pueden repetirse en otros 385 sitios de Colombia ubicados en zona de influencia de ríos.
El profesor Fernando Mejía, de la UN seccional Manizales, dijo este miércoles a la agencia de noticias de esa universidad que para evitar estas situaciones «lo más importante es hacer esfuerzos económicos que garanticen la reducción de la vulnerabilidad de las comunidades», sobre todo evacuando los barrios en zonas de riesgo.
Mejía, investigador del Instituto de Estudios Ambientales de la UN, consideró que «los 156,2 milímetros de lluvia registrados durante cinco horas y media en la ciudad podrían ser una consecuencia del cambio climático».
En Manizales, en lo que va de este siglo se han presentado «cerca de cinco aguaceros sobre los 140 milímetros de lluvia, que es lo que cae regularmente en un mes invernal en la zona Andina del país», dijo también el experto, citado en el texto.
La UN gestiona el sistema de estaciones hidro-meteorológicas de Manizales.