Eres Félix Rubén García Sarmiento,
Al llamarte así no miento,
Consta en tu acta de nacimiento.
Pero también eres el inmortal,
¡El insigne Darío el de la “Marcha Triunfal”!
El grande, el del famoso canto errante.
El de las prosas profanas y otras más.
El de las garzas blancas y morenas.
El del verso azul y la canción profana.
Aquel que siendo de un país pequeño,
Un buen día tuvo un sueño,
Convertirlo con su nombre en un gigante.
¡Lo lograste, tus ideas no fueron vanas!
¡Tu Nicaragua hizo temblar al mundo!
Porque en su suelo muy fecundo
Naciste tú, “El Príncipe de las Letras Castellanas”
J. René Roa S.
